Después de los actos protocolares y la espera, la 44° Fiesta Nacional e Internacional del Poncho ya se vive a pleno en el Predio Ferial Catamarca.

La jornada de ayer, enmarcada en un clima inmejorable, favoreció la llegada de miles de visitantes. Lo positivo es que se observó una importante presencia de turistas.

Los pabellones ya están funcionando a pleno, y la opinión generalizada de los artesanos es que hasta ahora todo está funcionando de la mejor manera.

No obstante, siempre habrá alguna observación que hacer, pero en este caso señalaron que son cuestiones mínimas.

Más de 700 stands artesanales de todo tipo, el pabellón cultural, la carpa Achalay, como también los sectores institucionales, productivos y comerciales, se vieron invadidos ayer por los visitantes.

Las ventas arrancaron un poco lentas según afirman, pero con las mejores expectativas para quienes trabajan durante todo el año en sus creaciones y las exhiben orgullosos en esta oportunidad.

Muchos tienen ya varios años viniendo a la fiesta mayor de Catamarca y la más importante del invierno argentino. Regresan porque el evento supera sus expectativas, recuerdan cuando la fiesta aún no tenía una sede fija y la comparan con las comodidades del Predio Ferial.

Por ello, afirman que el Poncho ha crecido año tras año hasta convertirse en uno de los destinos más atractivos para las vacaciones de invierno.

Los que vinieron por primera vez se manifiestan maravillados.

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