OSEP: sería «imposible» dar un nuevo aumento
El Gobierno ya les concedió un incremento del 20% que se aplicó a las facturaciones de abril.
NO HAY PLATA. LA OBRA SOCIAL, CON POCOS FONDOS DISPONIBLES.
Ni el Gobierno de la Provincia ni la Obra Social de los Empleados Públicos (OSEP) estarían en condiciones de pagar un nuevo incremento a los valores de las prestaciones que realizan las clínicas y sanatorios, ni tampoco los honorarios que cobran los médicos insertos en la nómina de la obra social.
Así lo aseguraron funcionarios de la Obra Social estatal, quienes si bien prefirieron no ser nombrados, aseguraron que ya hubo contactos extraoficiales con los facultativos y los propietarios de las clínicas, a quienes les dijeron que es «imposible» aplicar un nuevo incremento.
En particular, señalaron que en abril se concedió un incremento en los honorarios que facturan los médicos, y que en junio último, el ministerio de Hacienda y Finanzas entregó a la OSEP un total aproximado de 40 millones de pesos provenientes de un «adelanto de utilidades de regalías mineras», que fueron a parar, en gran medida, a saldar la deuda que tenía la obra social con el Círculo Médico de Catamarca.
Aún así, las sucesivas reuniones que se hicieron entre los socios del Círculo y de la Federación de Clínicas y Sanatorios (FECLISA), se optó por elevar nuevamente un pedido de aumento de honorarios y gastos.
La fundamentación es sencilla: los valores que se pagan actualmente, y en particular los que abona la obra social estatal, están atrasados respecto del avance de la inflación y lo elevado de los costos fijos de funcionamiento que tienen tanto las clínicas como los médicos para la atención de los pacientes.
Desde la OSEP, sin embargo, se dijo que el monto que se paga en la actualidad es de $90 por cada orden médica, uno de los valores (consideraron) más altos de todo el país, que solo superan la provincia de Mendoza y la ciudad de Buenos Aires.
Aún así, todavía no hubo ni una presentación formal del aumento a la OSEP o al ministerio, ni tampoco una negativa concreta hacia los prestadores.