“Negrito por fuera y blanquito por dentro”: el síndrome Oreo, la sugerente calificación de Grabois sobre un Moyano
El dirigente social destacó la figura Pablo Moyano, referente del gremio de Camioneros y uno de los impulsores del paro de hoy, pero reconoció que un integrante de esa familia le cae “particularmente muy mal”. “Es asquerosamente aspiracional”, sostuvo
El dirigente social Juan Grabois resaltó hoy la figura de Pablo Moyano, referente del gremio de Camioneros y uno de los impulsores del paro salvaje que afecta a los usuarios de trenes, aviones y subtes, y al transporte de cargas de camiones y barcos. Pero, a su vez, reconoció que un integrante de esa familia de dirigentes sindicales le cae “muy mal” porque, aseguró, “es asquerosamente aspiracional”.
“Pablo Moyano es un tipo muy estigmatizado, muy sensible, muy buen tipo, que lo quiere mucho su gente. Al resto de su familia no los conozco tanto, hay uno que me cae particularmente mal, porque me parece asquerosamente aspiracional. Tiene el síndrome Oreo, son negritos por fuera y blanquitos por dentro; quieren ser blancos”, graficó Grabois con una referencia a la reconocida galletita de chocolate, entrevistado en Radio Con Vos por Reynaldo Sietecase y Ernesto Tenembaum, quien le repreguntó: “Eso es Facundo Moyano…”.
“Eso lo estás diciendo vos”, replicó el dirigente social, y amplió: “Estoy haciendo una reflexión general sobre la sociología del aspiracional, que quiere insertarse en las elites oligárquicas y que siempre lo van a ver como una galletita Oreo. Es muy triste eso. Es mejor ser uno mismo”.
En otro pasaje del reportaje, Grabois defendió al sindicalismo, sobre todo en una jornada como la de hoy, donde el gobierno responsabilizó a este sector por la medida de fuerza en el transporte que afecta a miles de trabajadores. “Es el sector más estigmatizado de la Argentina y con peor reputación, mucho más que los movimientos sociales”, sostuvo.
Durante la mañana de hoy, el gobierno calificó a los dirigentes gremiales que impulsaron el paro como “Jinetes del atraso, pilotos de un tren fantasma”. “Con todos sus temas económicos resueltos, lo único que hacen es tratar de cuidar esos privilegios que fueron logrando con los últimos gobierno y que no tiene nada que ver con mejorarle la vida a nadie”, sostuvo el secretario de Transporte en diálogo con Radio Mitre.
Según el funcionario nacional, en la jornada de hoy “se le complicó la vida al laburante, a la persona común”, y el paro “no tiene ningún tipo de justificativo, porque hablan de temas abstractos como justicia social, soberanía…”.
Más allá de estas declaraciones, o la publicación irónica de Milei en las redes sociales, en las últimas horas el gobierno nacional comenzó a difundir a través de diversos canales de comunicación institucional el siguiente mensaje: “Los sindicalistas no te dejan ir a trabajar”. Se puede ver en las pantallas de varias estaciones ferroviarias. De esta forma, el Gobierno insta a denunciar a la línea 134 a quienes no puedan llevar adelante su jornada laboral cotidiana por medidas de fuerza de su propia actividad.
Ayer, a través de la app Mi Argentina, la misma consigna se repitió en millones de celulares del país que tenían descargada la aplicación oficial. Los usuarios recibieron un aviso pop-up que responsabilizaba por la medida de fuerza a Moyano y al titular de pilotos de APLA, Pablo Biró.
El paro es impulsado por la Mesa Nacional del Transporte, que integran Moyano y Omar Pérez (Camioneros), Juan Pablo Brey (Aeronavegantes), Omar Maturano (La Fraternidad), Juan Carlos Schmid (FEMPINRA), Biró (APLA) y Raúl Durdos (SOMU), a quienes después se sumaron otros dirigentes como Beto Pianelli y Néstor Segovia (Metrodelegados), Marcelo Pariente (motoqueros), Jorge García (peones de taxis), Graciela Aleñá (viales) y Roberto Coria (guincheros).
Lo promovieron a partir de la decisión de profundizar la confrontación con el Gobierno de Javier Milei. Moyano representa el “ala dura” de la CGT, que está en contra del diálogo que promueven el resto de los líderes de la central obrera. El vocero presidencial Manuel Adorni lo calificó como “un paro político” y dijo que los sindicalistas son “defensores de sus privilegios en perjuicio de la gran mayoría”.