“Nadie la va a reclamar”: los estremecedores audios de WhatsApp de los acusados por el crimen de Sofía Delgado
Uno de los sospechosos también buscó en internet cómo matar y esconder a una persona. La joven tenía 20 años. El cuerpo fue encontrado en la localidad de Ricardone, en Santa Fe.
Se conocieron estremecedores audios de WhatsApp que se enviaron los detenidos por el crimen de Sofía Delgado, la chica de 20 años que estuvo desaparecida y que fue encontrada muerta en una zona rural de Ricardone, provincia de Santa Fe.
Alejandro Bevilacqua, Eduardo Mordini, Brian Bauman, Miranda Leguizamón y Natalia Palavecino son los cinco acusado del femicidio. De acuerdo de lo que se desprendió del celular del transportista Bevilaqua, buscó en internet cómo matar y esconder a una persona.
Hay chats entre Bevilacqua y Mordini donde hablan de esconder el cuerpo y dicen que “nadie lo va a reclamar”. El argumento de ellos era que se trataba de una chica con “problemas de adicción”.
“Hablaban de Sofía, que nadie la iba a reclamar, para sacrificarla y descargar su ira. Eran mensajes y links de webs con mujeres teniendo relaciones atadas”, indicaron fuentes de la investigación. Al mismo tiempo, afirmaron que “no hubo ritual, lo que hubo una premeditación” que comenzó en octubre.
El juez de primera instancia, Eugenio Ramanin, hizo lugar al pedido de la fiscalía e imputó a los tres hombres como partícipes del homicidio. También se les dictó prisión preventiva por 180 días.
Por su parte, a las dos mujeres se les atribuyó el delito de encubrimiento y se les ordenó una serie de restricciones: deben fijar un domicilio y tienen prohibido todo tipo de contacto con los familiares de la víctima
Así fue el crimen de Sofía Delgado
Entre las 23.15 del 30 de octubre hasta las 9.30 del día siguiente, Alejandro Bevilacqua, que tenía una relación con la víctima, Sofía Delgado, pasó a buscarla por su casa en un Peugeot 308, según se pudo reconstruir el fiscal Carlos Ortigoza, de la sede fiscal San Lorenzo.
Los acusados la trasladaron hacia un galpón en Corrientes al 100 de la localidad de Puerto General San Martín, el cual era propiedad de Eduardo Mordini. “El dueño del taller reconoce que estaba el cuerpo, pero quiere desvincularse del homicidio”, explicaron fuentes de la investigación. En ese lugar le provocaron la muerte por asfixia mecánica.
Después de esto, Brian Bauman -empleado del taller- con el fin de ocultar el cuerpo, ató de pies y manos a Sofía y la metió en una bolsa negra. De ahí la recubrió con un aislante térmico y colocó el cuerpo en una bolsa arpillera de construcción.
Posteriormente, la víctima fue dejada en una zanja al costado de un camino de tierra en zona rural a 700 metros de la curva del Camino de la Cremería, de la localidad de Ricardone. La encontraron el viernes 15 de noviembre por la noche.