Intenso Temporal azotó Belén afectando Muchas Viviendas
Alrededor de 3.000 afectados Cayeron 152 milímetros de agua en apenas cinco horas y la ciudad quedó prácticamente paralizada. Un drama repetido que se está viviendo en la provincia con cada temporal, se convirtió ayer en una realidad en Belén. Desde que la lluvia comenzó a arreciar, a las 8 de la mañana, el agua subió sin pausa, afectando a la mayoría de las viviendas de la Ciudad. Prácticamente todas las calles de la ciudad quedaron tapadas por el agua. Los barrios más castigados fueron Santa Rosa, Las Flores, Artaza, El chañaral, 90 viviendas, 250 viviendas, 33 viviendas, La Puntilla, San Antonio, El Puente y La Banda Ante este panorama, desde el Municipio se le pidió a la gente que «permanezca en sus casas» para no agravar la situación y minimizar probabilidades de accidentes, y para afrontar la catástrofe se creó un comité de crisis que encabezó el lntendente José Arnoldo Ávila.Recorrieron la ciudad haciendo relevamiento de las viviendas afectadas, además el Municipio movilizó la totalidad de los vehículos y máquinas entregando materiales, plástico, cerrando calles anegadas y realizando barricadas de tierra apara frenar el avance del agua en las viviendas.
Los ríos El Molino y La Cañada, que no tenían crecidas desde hace más de una década, esta vez crecieron dejando incomunicados a los barrios cercanos. También fue afectado el sistema eléctrico, con caídas de postes de luz que provocaron cortes, especialmente hacia el Norte del Departamento y en Londres.
Los daños son incalculables,centenares de familias perdieron muebles cuando el agua ingresó a sus casas, otros sufrieron el desmoronamiento de techos y/o paredes. Por esto se hace urgente la necesidad de colchones, ropa de cama, plástico, chapa y maderas para cubrir o reparar los techos. Los ciudadanos también salieron a la calle para combatir las inundaciones, colaborando con los vecinos más afectados, tratando de ayudarlos a levantar todo aquello que se pudiera de los pisos de sus casas, en las que el agua no paraba de subir, o armando defensas improvisadas que impidieran el ingreso de agua.