Franco Colapinto y un avance antes de la clasificación en Mónaco
El argentino mejoró su tiempo del viernes, aunque no la posición: quedó último, pero con mejores sensaciones y más confianza para llegar al momento clave del fin de semana

Desde Alpine le confesaron a ESPN.com que el trabajo de Franco Colapinto iba paso a paso, que lo fundamental de los entrenamientos pasó por tomar confianza en la pista. Y a eso se dedicó en las tres sesiones en las que completó 95 giros. Lo importante es que de tanda a tanda fue mejorando sus tiempos. Y en la tercera de este sábado, justo antes de la clasificación, logró su mejor registro con 1m12s851. Por primera vez en el fin de semana, el piloto argentino logró bajar de los 73 segundos, aunque ese tiempo lo dejó en el último lugar nuevamente.
En su progresión, Colapinto mejoró casi un segundo desde la primera tanda a la última (había marcado 1m13s820 en la inicial). Eso sí, como es lógico, para mejorar los registros en Mónaco no queda más remedio que acercarse a las paredes. Y eso lo llevó a tocar el guardrail a la salida de la chicana de la Piscina, un toque leve con los neumáticos derechos. Pasó por boxes, el equipo de Enstone revisó que todo estuviera ok y volvió a pista. De hecho, sus mejores tiempos llegaron tras el roce.
En cuanto a la puja interna con su compañero Pierre Gasly, Colapinto había quedado a 1s151 del francés el viernes al mediodía y pasó a ser de 657 milésimas el sábado, en el cierre de los ensayos. La progresión fue buena, pero Alpine está lejos. De hecho, en la mitad de la tanda, el equipo realizó un cambio fuerte de puesta a punto en el A525 del francés, para tratar de mejorar el rendimiento.
Se terminó el tiempo de acostumbrarse al auto y de ganar confianza. El próximo paso será la clasificación, tal vez, el momento más importante del fin de semana en la historia de Mónaco. Pasar autos en el intrincado urbano es casi imposible y una mala qualy es condenarse a un domingo complicado. Para Colapinto, el problema es que no buscó los límites en las tres tandas y deberá hacerlo directamente en la clasificación. En Imola había pasado algo parecido, en la Q1 fue sobre el piano de Tamburello como no lo había intentado jamás. Son los desafíos que se enfrenta un piloto de F1 y más en Mónaco. Lewis Hamilton se pegó en pleno entrenamiento, es decir, hasta el más pintado puede caer en la trampa monegasca.