El veto de Milei | De Jalil a Passalacqua, el aporte clave de los gobernadores para cerrarle el paso a la oposición
Un puñado de mandatarios provinciales realizaron, por acción u omisión, un valioso y trascendental aporte para que la Casa Rosada pudiera sortear una dura derrota legislativa
El caso de la peronista catamarqueña Fernanda Avila, que responde al gobernador Raúl Jalil y decidió quedarse en su despacho mientras se desarrollaba la sesión, es la imagen emblemática que refleja el papel clave que jugaron varios mandatarios provinciales para permitirle al gobierno de Javier Milei blindar el veto total a la ley de financiamiento universitario y frenar una nueva embestida opositora en la Cámara de Diputados.
Además de Jalil jugaron a favor del Poder Ejecutivo el también peronista Osvaldo Jaldo (Tucumán), Claudio Vidal (Santa Cruz), Ignacio Torres (Pro-Chubut) y Hugo Passalacqua (Frente Renovador de la Concordia de Misiones), quienes movieron de manera estratégica sus piezas sobre el tablero de la Cámara baja de manera tal de permitirle al Gobierno superar el tercio de los votos necesarios para impedir la insistencia en la ley que había sido sancionada el mes pasado.
En total, estos gobernadores aportaron con sus jugadas, ya sea por acción mediante el rechazo explícito a la insistencia o por omisión al ausentarse de la sesión, permitieron que el oficialismo consiguiera 85 rechazos, impidiéndole a la oposición alcanzar los dos tercios al dejarlos en 159 votos.
El caso de Jalil también sirve para ilustrar el juego de algunos gobernadores en su ayuda al Poder Ejecutivo. Es que la diputada Avila fue la pieza que decidió sacrificar en esta oportunidad el mandatario provincial, al que le responden, aunque con matices, tres de los cuatro representantes peronistas de Catamarca que integran el bloque de Unión por la Patria y que votaron a favor de la insistencia.
Un caso parecido es el del santacruceño Vidal. El gobernador de extracción peronista que destronó al kirchnerismo en la provincia patagónica controla a uno de los dos diputados que su fuerza provincial tiene en la Cámara baja desde diciembre.
Así fue como José Luis Garrido votó en contra de la insistencia, es decir a favor del Gobierno, mientras que Sergio Acevedo, de juego más independiente, lo hizo a favor. Así, Vidal quedó poniendo un huevo en cada canasta, como dijo un experimentado diputado de la oposición con larga experiencia en armar y desarmar mayorías en los recintos de ambas cámaras legislativas.
El premio a la disciplina y al alineamiento con la Casa Rosada se lo llevó el tucumano Jaldo, que logró alinear en el apoyo al veto de Milei a los tres diputados que le responden y que, a principios de año, cuando cerró su apoyo a la gestión libertaria, sacó de la bancada kirchnerista para conformar el denominado bloque Independencia.
En una sesión como la de esta tarde cada voto cuenta y vale. Así que por más que parezca humilde, el aporte del chubutense Torres (Pro) también tuvo su impacto a la hora en el que el tablero del recinto de la Cámara baja indicó que la insistencia había resultado rechazada.
En ese sentido, en los pasillos de la Cámara alta algunos sospechaban sobre la ausencia por enfermedad de Jorge Avila, dirigente del sindicato de los petroleros y de buena relación con el mandatario provincial. Además, votó en contra de la insistencia Ana Clara Romero, en este caso amparada en la decisión del Pro de apoyar al Gobierno en esta pulseada legislativa.
Por último, aunque no fue sorpresa, ya que el alineamiento del gobierno misionero con la Casa Rosada es automático desde que se desactivó las protestas salariales de policías y docentes en las provincias, el gobernador Passalacqua también jugó a favor de Milei.
En este caso fue por omisión, ya que los diputados Alberto Arrúa, Yamila Ruiz y Daniel Vancsik del Frente Renovador de la Concordia de Misiones, que lidera Carlos Rovira, decidieron abstenerse, retaceándole a la insistencia en la ley de financiamiento universitario tres votos que podrían haber agregado suspenso.