El príncipe Carlos llamó al sector financiero a que «ayude a frenar el cambio climático»
«El tiempo, literalmente, se acabó. Los esfuerzos no pueden ser una serie de iniciativas independientes que corren en paralelo», planteó el heredero de la corona británica en representación de su madre, la reina Isabel.
El príncipe -quien participa de la cumbre en representación de su madre, la reina Isabel, que se excusó por prescripción médica- se dirigió con esta advertencia al dar la bienvenida a los líderes mundiales que asisten este lunes a la COP26, la cumbre climática que se celebra en la ciudad escocesa de Glasgow, Reino Unido, y los instó a ver el calentamiento planetario como una amenaza existencial similar a la guerra.
El heredero de la corona británica advirtió que nuestros «esfuerzos no pueden ser una serie de iniciativas independientes que corren en paralelo» e indicó que la escala y el alcance de la situación requieren una solución a nivel de sistemas globales.
Dijo que «el costo de la inacción es mucho mayor que el costo de la prevención» y pidió a los líderes mundiales a encontrar formas prácticas de superar las diferencias para que «todos podamos ponernos manos a la obra para salvar este precioso planeta».
«Sé que todos ustedes llevan una pesada carga sobre sus hombros y no necesitan que les diga que los ojos y las esperanzas del mundo están sobre ustedes», expresó.
Señaló que «el mundo debe reducir las emisiones con urgencia y tomar medidas para abordar el carbono que ya está en la atmósfera«.
«Mi oración de hoy es que los países se unan para crear el entorno que permita a todos los sectores de la industria tomar las medidas necesarias. Sabemos que esto requerirá billones, no millones de dólares», afirmó.
«Mi oración de hoy es que los países se unan para crear el entorno que permita a todos los sectores de la industria tomar las medidas necesarias. Sabemos que esto requerirá billones, no millones de dólares»
También hizo un llamado al sector financiero para que ayude a frenar el cambio climático, diciendo que esta industria tiene aún más poder que los líderes mundiales.
Advirtió que el sector «ofrece la única perspectiva real» de marcar la diferencia.
«Necesitamos una amplia campaña de tipo militar para reunir la fuerza del sector privado mundial. Tenemos que ponernos en lo que podría llamarse en pie de guerra», afirmó.