El Obispo Urbanc Confirmó a cientos de Jóvenes en Belén
En la mañana del domingo 31 de mayo se confirmaron los jóvenes y adolescentes de la Ciudad de Belén en el Santuario Nuestra Señora de Belén. El Sábado realizó lo propio en Pozo de Piedra y Puerta de San José y Londres. Presidieron la Celebración en Belén Obispo Diocesano, Mons. Luis Urbanc, junto al Párroco, Pbro. Víctor Vizcarra , Luis Delgado y Juan Gutiérrrez.
Cientos de adolescentes y sus familias de toda la Comunidad de Belén recibieron el Sacramento de la Iniciación Cristiana en el Santuario de Nuestra Señora de Belén. El sacerdote presentó a los jóvenes, atestiguando su preparación para ese momento, y ellos expresaron sus deseos de recibir al Espíritu Santo, para que los ilumine con la luz de la fe, los encienda con el fuego del amor y los confirme para dar testimonio de Jesús.
En la homilía, el Pastor Diocesano se dirigió a los presentes, diciendo»Tenemos que dejarnos abrazar por el fuego del amor de Dios, que nos da el espíritu Santo, por eso Jesús ha dicho, es necesario que yo me vaya, porque si no me voy no vendrá el Espíritu Santo y si el espíritu Santo no viene ustedes seguirán en su ignorancia, van a seguir en su dureza de corazón, van a seguir en su indiferencia, van a seguir en sus miedos, van a seguir en su apatía, en cambio si viene el Espíritu Santo él va a dar fuerza , vida».
En su última parte el Obispo Urbanc Dijo: “Ahora si Ustedes no leen la palabra de Dios, si ustedes no rezan no pueden decir, que han rezado, que han meditado la palabra, que han estudiado, eso es lo triste de los católicos no pueden transmitir a Dios porque no se encuentra con él y eso pasa con el Papá y la Mamá, miren si tuviéramos papás y mamás que que rezan todos los días, que hablan de la palabra con sus hijos, nuestro mundo cambia totalmente, pero no tenemos esos padres, porque tenemos solo padres que solo andan buscando plata, lo único que hablan es de plata, ese es el dios que tiene los papás hoy , plata y trabajo. Hay que cambiar, hay que modificar muchas cosas en la vida de hoy porque nos estamos destruyendo y la culpa la tenemos nosotros. No queremos cambiar el sistema, entonces los hijos que ven Papás esclavos del dinero, del trabajo, que se pelean cuando vienen cansado del trabajo, se tiran los pelos y los chicos sufren. Que quieren los chicos en la casa, Amor, quieren personas felices, que sonrían, no amargados y quien nos va a dar la fuerza para poder modificar es el Espíritu Santo»