Don Demetrio Gómez y el Arte del Telar
Es un artesano textil de la Ciudad de Belén con muchos años de oficio en la elaboración de hermosos ponchos, puyos, mantas y otras tantas piezas artesanales realizadas en un rústico telar, se trata de Don Demetrio Gómez, quién con la gentileza que lo caracteriza hizo un alto en el cotidiano trabajo para comentar sobre las actividades que llevan a cabo junto a su esposa y la realidad actual que les toca vivir.
En ese sentido señaló: «Hemos mermado la producción de los tejidos por motivo de que hemos quedado solos, nuestros hijos se han ido, ellos no quieren seguir en lo nuestro, quizás porque ven que este trabajo es muy sacrificado y con las ventas que se llevan a cabo no se compensa los trabajos realizados, así que seguimos haciendo telas, no tantas como antes pero se hace bastante. Nuestros hijos nos ayudaban a tejer que es bastante duro, ahora nosotros tejemos pero lo hacemos de a poco, tampoco podemos conseguir teleros. Yo me acuerdo cuando llegué a la ciudad de Belén (anteriormente vivía en el interior del Departamento), toda la gente joven y grande buscaban trabajar en esto, ahora no se consigue a nadie, yo he buscado porque queremos que nos ayuden en el trabajo pero no se consigue».
Sobre la decisión tomada por los hijos en buscar otros horizontes, dijo: «A pesar de haber aprendido todo en cuanto a los tejidos, nos guste o no debemos respetar la decisión tomado por ellos, desde acá no le vamos hacer la vida, uno tiene la mejor intención de hacerle una mejor vida económicamente hablando pero para nosotros es imposible porque no tenemos los medios, de manera que a ellos no se le puede privar la oportunidad de buscar otros rumbos».
A su vez comentó; «Lamentablemente hemos dejado de salir a las ferias, a las exposiciones porque nos encontramos solos y el tejido es pesado para trasladarlo de un lado a otro porque muchas fuerzas no podemos hacer pero a un evento importante por ahí hacemos el sacrificio y vamos, porque hay ferias muy buenas en el país y fuera de él también, como hace 4 años anduvimos en Santiago de Chile a donde nos invitaron con todos los gastos pagos por gente amiga que uno conoce allá y este año nos volvieron a invitar pero hasta ahora no hemos determinado nada si vamos o no a la feria que creo que se hace en octubre o noviembre».
En cuanto a que si los visitan los turistas que llegan a esta ciudad y si les compran sus prendas puntualizó: «Hay gente que nos conoce mucho, vienen siempre por acá, además nos encargan las prendas que quieren que le hagamos, y estamos trabajando en eso, por lo que no nos quejamos del todo, nada más que por ahí como artesano tradicional, porque nosotros lo único que compramos es la lana porque no somos productores, y todos los trabajos hasta el final de la prenda lo hacemos nosotros hasta el final, que nos cuesta mucho hacerlas y casi nunca se vende. El turista es una persona que admira nuestras habilidades, vienen y ven como estamos haciendo la tela en el telar, y nosotros sabemos atenderlos como corresponde por lo que se van muy conformes, nada más que por ahí se lamentan la situación que estamos viviendo todos los sectores de la sociedad, que no le permite llevarse lo que desean».