Crimen del ministro Rojas: arrestaron a una mujer que sería sospechosa del asesinato

Se trata de la empleada que realizaba tareas domésticas en la vivienda de la víctima.

Durante un arduo trabajo mancomunado entre los tres fiscales que investigan el grave hecho de sangre del que fue víctima el ministro de Desarrollo Social Juan Carlos Rojas, ayer se conoció que se ordenó el arresto en averiguación de una mujer, quien sería empleada doméstica de la víctima.

Aparentemente, luego de analizar las pruebas científicas y las pericias técnicas a los aparatos de telefonía secuestrados, allanaron el camino a los pesquisas para el posible esclarecimiento del atroz crimen del funcionario.

Según las mismas fuentes, los tres representantes del Ministerio Público, quienes seguían líneas diferentes de investigación, llegaron a la conclusión de que la presunta autora del homicidio de Rojas sería su propia empleada doméstica.

De acuerdo a lo que se pudo conocer, debido a que continúa vigente el secreto de sumario, durante la declaración de la ahora arrestada habría ciertas inconsistencias que, sumadas al análisis de los registros fílmicos de la zona del domicilio del ministro, junto con las pericias a los celulares, arribarían a las sospechas de que se trataría de la asesina.

Cabe destacar que los investigadores no abandonaron ninguna línea de investigación sobre el caso, pero los indicios más fuertes se centrarían en quien fue la empleada doméstica de Rojas.

En el marco de la investigación, se llevaron a cabo múltiples medidas de allanamiento en distintos domicilios, entre ellos la oficina de Desarrollo Social, donde trascendió que se logró el secuestro de una CPU que era utilizada por la víctima.
También se procedió al secuestro de cuadernos con anotaciones del ministro y las sábanas del domicilio donde vivía, en la zona norte de la Capital.

Ayer, personal de Homicidios, junto con el fiscal Hugo Leandro Costilla, se constituyeron en la vivienda de Juan Carlos Rojas y mediante reactivos químicos divisaron manchas de sangre en la escena. Según trascendió, no se encontraban a simple vista sino que recién fueron advertidas con la aplicación del químico.

A la vez, se continuaba con el análisis de los registros fílmicos de las cámaras de seguridad que se encuentran ubicadas en cercanías del domicilio de la víctima.

Cabe recordar que el fiscal Laureano Palacios ordenó el secreto de sumario en el expediente, debido a la sensibilidad de la situación y en caso de filtración de información, esta podría perjudicar el accionar de la Justicia.

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