Continúa el desesperado rescate en Marruecos de un niño que cayó hace cinco días en un pozo
Lanzados en una carrera contrarreloj cada vez más desesperada, socorristas marroquíes trabajaban este domingo para intentar salvar a Rayan.

«Vinimos a apoyar a los socorristas. Rayan es un niño de nuestra región, rezamos a Dios para que se salve», dijo un voluntario, quien agregó. «No nos iremos hasta que salga del pozo».
«Ya casi hemos llegado. Trabajamos de manera constante. El cansancio se hace sentir, pero todos los equipos de rescate están resistiendo a pesar de los imprevistos», dijo uno de los responsables del operativo.
Rayan cayó accidentalmente el martes pasado en un pozo seco, estrecho y de difícil acceso, excavado a proximidad de la casa familiar, en la aldea de Ighran, cerca de la ciudad de Bab Berred, en la provincia norteña de Chefchauen.
«Conservo la esperanza de que mi hijo saldrá vivo de ese pozo», declaró anoche el padre de Rayan a un canal marroquí. «Agradezco a todas las personas movilizadas y a aquellas que nos apoyan en Marruecos y otros lugares», añadió.