Con la solemne bajada de la Virgen comenzaron las fiestas en su honor
El obispo Luis Urbanc pidió a la Madre del Valle "una abundante lluvia de bendiciones para cada rincón de nuestra Patria. Que cada persona que mora en este suelo tenga lo necesario para vivir dignamente".

Durante la tarde de ayer sábado y con gran participación de los fieles, Catamarca dio inicio al septenario en honor de Nuestra Señora del Valle, con la solemne bajada de la Sagrada Imagen desde el camarín hasta el presbiterio.
En su paso hacia el trono festivo, las autoridades tomaron gracia de la Imagen cuatro veces centenaria de la Virgen del Valle de Catamarca, mientras en el templo la esperaban fieles y devotos que desbordaron el recinto sagrado para ser parte de esta celebración.
Vivas, pañuelos flameando y rostros emocionados fueron los gestos de esta jornada en donde la Morena Virgen del Valle se acercó al pueblo catamarqueño para permanecer allí por unos días.
A esta multitud fervorosa se sumaron muchos otros de manera virtual a través de la transmisión de las redes sociales donde los devotos hijos de María Santísima la saludaban, le hacían pedidos especiales y le agradecían por su protección material.
Después de que la Imagen fue colocada en el trono ubicado en el presbiterio se rezaron los misterios gozosos del Santo Rosario.
El Obispo pidió bendiciones
El obispo Urbanc inició su mensaje dando la bienvenida a todos en estas celebraciones en honor de la Madre del Valle.
Posteriormente, pidió a la Madre Morena «una abundante lluvia de bendiciones para cada rincón de nuestra Patria, a fin de que cada persona que mora en este suelo bendito tenga lo necesario para vivir dignamente, sintiéndose amada y respetada, deseosa de promoverse y de ayudar a que otros se promuevan en sus justas aspiraciones, y cuidando responsablemente su vida y la de los demás, sobre todo, que tengan una fe viva”.
Monseñor Urbanc concluyó dando gracias a la Madre “por estar siempre al lado de tus hijos, que ciertamente lo somos todos los seres humanos que habitamos este planeta, ya que así lo dispuso tu hijo Jesucristo antes de expirar en el patíbulo de la cruz para redimirnos de nuestros pecados (…). Y, por eso, te acogemos y veneramos en nuestros corazones, hogares, templos, pueblos y naciones”.
Procesión
La celebración mariana concluirá el próximo domingo 14, a partir de las 18, con la tradicional procesión que, de acuerdo con lo programado, se extenderá desde la plaza El Maestro hacia la Catedral.