La Corte otorgó beneficios al ex intendente Enrique Aybar

Se trata del ex intendente de Puerta de Corral Quemado, departamento Belén, Enrique Aybar, y del jockey Agustín Sarmiento, condenados por la Cámara Penal N°1 y 3 por delitos contra la integridad sexual de dos menores de edad.
La Sala Penal de la Corte de Justicia resolvió el jueves 14 de diciembre hacer lugar al recurso planteado por el abogado particular Pedro Vélez en defensa del exintendente y del jockey, que en líneas generales solicitó se les otorgue a ambos clientes los beneficios que por ley les corresponde al haber cumplido ya la dos terceras partes de la pena impuesta, lo que le fue denegado por el juzgado de ejecución.
Entienden los ministros de la Sala Penal que ambos imputados deben recibir primero el beneficio de la salida transitoria y en breve el beneficio de la libertad condicional, ya que la ley que se debe aplicar para el cómputo de la pena debe ser la más benigna, es decir la que favorezca al imputado, y no la más gravosa, que fue tomada por el juzgado de ejecución para denegar los beneficios a los condenados.
Actualmente ambos cumplen la condena en el Penal de Miraflores.
La resolución de la Sala Penal de la Corte de Justicia fue el día jueves 14 de diciembre notificada vía online a las partes del proceso, por lo que los condenados podrían este fin de semana empezar a gozar de los beneficios carcelarios y salir a la calle, debiendo en principio regresar al penal a dormir.
La Cámara Penal N° 3 confirmó en mayo de 2022 la sentencia por abuso sexual para el exintendente de Puerta de Corral Quemado, Enrique Aybar, quien fue condenado a la pena de seis años de prisión efectiva por abusar sexualmente de una menor de edad en 2013. Aybar fue condenado por hechos ocurridos en abril de 2013 en la ciudad Capital, a donde viajó con la víctima, en ese momento de 15 años, y su madre, con la excusa de conseguir una beca para la menor de edad por su buen desempeño escolar.
El intendente habría buscado la oportunidad de quedarse solo con la niña y, sin que ella pudiera hacer nada, en una ciudad desconocida (la jovencita era oriunda de la pequeña localidad belicha) la trasladó contra su voluntad a un hotel alojamiento, donde la vejó brutalmente y la amenazó.