El amigo de Joaquín Sperani confesó el crimen y dijo que «no existió intención de matarlo»
El adolescente contó detalles del hecho ante el juez de Control, Niñez, Adolescencia, Penal Juvenil, Violencia Familiar y de Género y Faltas.
El adolescente de 14 años, sospechoso del homicidio de su amigo Joaquín Sperani, confesó haber sido quien asesinó al adolescente de Córdoba y aseguró que “no tuvo intención” de matarlo. Además, reveló algunos detalles del crimen.
El menor declaró el jueves ante el juez de Control, Niñez, Adolescencia, Penal Juvenil, Violencia Familiar y de Género y Faltas, Sebastián Ignacio Moro. “Ha reconocido que es el autor del crimen”, precisaron desde la Justicia. El chico “hizo un relato en donde admite que participó solo, que no hubo participantes, que todo sucedió a partir de una fuerte discusión, que tomó un fierro y le pegó en la cabeza”, según resumió un vocero judicial.
El asesinato ocurrió el pasado 29 de junio en la localidad cordobesa de Laboulaye. El 2 de julio Joaquín apareció muerto en una casa abandonada. El relato de los hechos del joven de 14 años, que por su edad es inimputable, “condice con lo que se ha podido reconstruir a través de las imágenes de tres cámaras de seguridad, en donde claramente se los ve ingresar a los dos (a un baldío)”, del cual el acusado se retiró “solo”.
En un tramo de su declaración el compañero de colegio de Joaquín “dijo que no tuvo intención de matarlo”. El joven de 14 años permanece alojado en “situación de encierro preventivo” en el Centro de Admisión y Diagnostico (CAD), que depende del Complejo Esperanza de la ciudad de Córdoba.
Según precisaron allegados a la causa a Télam, con base en el resultado preliminar de los estudios psicológicos a los que fue sometido, “el chico tiene discernimiento, comprendió lo que hizo, pero quizás aún no ha dimensionado las consecuencias sobre los daños que ha ocasionado”.
El adolescente continuará en el CAD, donde será sometido a nuevos estudios para que luego la Justicia se expida sobre su destino de tutela, que seguramente serán sus padres, previo a contar con todos los informes que aseguren “el resguardo de su integridad y la de terceros”. “No se trata de un chico violento”, indicaron y además aseguraron que tiene que recuperar su escolarización.
El magistrado a cargo de la causa tiene que realizar un proceso de investigación y determinar las responsabilidades para luego dictaminar, previos resultados favorables de los estudios sociopsicológicos, si corresponde mantener al joven en situación de encierro o reinsertarlo tutelarmente.
“Es un psicópata”: la familia de la víctima teme que liberen al asesino
La semana pasada los padres de Joaquín Sperani encabezaron una marcha para pedir justicia por el crimen del niño de 13 años y una condena ejemplar para el asesino, que temen que quede en libertad dada su edad.
“El abogado me dijo que cuando cumpla 18 no le pueden abrir una causa. Me dijeron que por ley, para su mayoría de edad, se recupera, pero un chico de estas características no se recupera. Estamos hablando de un psicópata”, advirtió días atrás Mariela Flores, madre del joven asesinado.
“¿Y si lo largan? Mirá si se aparece en mi casa y busca a alguno de mis hijos para seguir haciendo lo mismo. Mi desesperación es que lo dejen libre”, lamentó indignada.
Si bien el jueves trascendió que el asesino admitió haber actuado solo, la madre de Joaquín la semana pasada había planteado sus dudas al respecto: “No me cabe en la cabeza que no tenga tantas manchas de sangre en el cuerpo cuando vuelve a clase. Sostengo que hay más involucrados. No quiero quedarme con las manos vacías”.